Una de las cosas que nos han traído las redes sociales es un cambio en cómo valoramos o nos fiamos de una empresa. El valor de una recomendación o la sensación que se nos queda después de escribir por redes sociales a una marca ha ganado muchísimo peso en nuestras decisiones de compra.
Creo que es un cambio positivo. Vale, puede que sigamos fijándonos en las apariencias. Pero éstas han pasado de temas numéricos (fíate de ellos, tienen muchas sedes, sus oficinas son grandes, tienen, tienen, tienen…) a temas más humanos (escribí por Twitter y me trataron genial, son muy amables, se preocuparon porque todo estuviera perfecto…).
Nos dejamos llevar por las apariencias. Pero ahora nos fiamos de una empresa por el buen trato humano y no por el tamaño de sus… oficinas
Dentro de esa humanización de las marcas, tu foto de perfil sea seguramente el primer impacto visual que los usuarios tengan sobre ti. Bien sea a través de las redes sociales o de la página web, la calidad y estilo de tu retrato corporativo dice muchísimo sobre ti. Y de manera inconsciente va a generar una primera impresión en el usuario sobre tu trabajo.
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La importancia de un buen retrato corporativo
Qué fotografía elegir o el tipo de retrato que quieres para tu perfil profesional es una decisión estratégica como marca. Pero, más allá de eso, una fotografía desenfocada o de baja calidad va a transmitir al usuario una imagen descuidada y poca atención a los detalles. Y eso se traslada casi sin querer a la reputación de tu marca.
Si ese retrato corporativo (en Linkedin, en Twitter, en tu página web…) es lo primero que va a ver el usuario, debe transmitir al 100% la imagen de marca que quieres tener. Tienes que hacer uso del lenguaje corporal y guiar a ese futuro cliente para que siga interesándose por ti.
Me has caído bien; ahora, ¿en qué puedes ayudarme? soy todo oídos
Lo sabemos, nunca hay tiempo para planificar una sesión de fotografía corporativa. Pero una sesión bien organizada te permitirá unificar la imagen de tu marca y mejorar ese primer impacto en el usuario.
Mientras le das prioridad y buscas en tu agenda un hueco para revisar tus fotos, te dejamos 4 consejos para mejorar tu retrato corporativo y transmitir mejor tu imagen de marca:
Una imagen actualizada
Sí, es duro. Todos tenemos un momento en el que nos hicieron la foto perfecta y nos intentamos aferrar a ella como sea.
Para tus recuerdos o perfiles personales eso está genial; pero recuerda que aquí estamos hablando de un retrato profesional y de transmitir una imagen de marca.
Es posible que generes un buen primer impacto pero, ¿qué pasará si tienes que tratar con ese cliente cara a cara en algún momento?
Muchas veces, en eventos y conferencias, cuando dos personas se han visto en persona por primera vez, he oído algún diálogo parecido a este:
– ¡Ya era hora de ponernos cara! No te había reconocido, estás muy diferente a tu foto de perfil.
– jajajaj, pues sí. La verdad que ya tiene unos años y tendría que cambiarla…
En estos casos no pasa de ser una anécdota. Pero con un cliente, por estúpido que parezca, puede generar una fricción este cambio de imagen. Nos hacemos una imagen mental de una persona que no conocemos gracias a esa foto de perfil.
Si después eso cambia demasiado, nuestro cerebro (aunque no nos demos cuenta) va intentar ordenar todo de nuevo. Y durante ese tiempo, ya no estaremos prestando el 100% de la atención.
Si hablamos de marketing, distraer u ofrecer puertas de más a un posible cliente puede ser un error gravísimo.
Lo ideal es mantener en nuestros perfiles un retrato corporativo reciente, no más allá de 3 o 4 años. Y mentalizarnos de que tu imagen de hoy es la mejor imagen profesional que puedes dar.
La postura adecuada
Hablábamos hace unas semanas de la charla TED de Amy Cuddy’s sobre lenguaje corporal. Si aún no la has visto, te recomiendo encarecidamente que vayas a ver el vídeo (lleva más de 51 millones de visualizaciones cuando escribo este post).
En la charla, Amy Cuddy’s transmite la idea clara de que la postura en tu foto de Linkedin (o cualquier retrato corporativo que uses) determina en cierta medida tu personalidad y forma de actuar.
Para tu foto de Linkedin, levántate y mantén una postura erguida. Transmitirás más confianza y profesionalidad. En algunas ocasiones, salir del estudio y hacer el retrato corporativo en exteriores puede ayudarte a estar más relajado mentalmente.
Si te sientes más cómodo y relajado será más fácil que muestres esa confianza en la foto. Aquí el papel del fotógrafo es bastante importante, ya que te ayudará con la postura de tu cuerpo y tu cabeza, además de con las expresiones que mejor transmitan tus objetivos.
Estar a la altura
Tienes que estar concentrado y convencido antes de hacer una sesión corporativa. Si le das poca importancia o estás más preocupado por terminar y pasar el mal trago, seguramente se transmitirá a las fotos que tengas. Aquí poca magia podrá hacer el fotógrafo.
Por eso es importante también darle valor a la planificación de la sesión. En ese momento será cuando organices con el fotógrafo cómo será la sesión, busquéis referencias del tipo de fotografía que quieres, los objetivos que se tienen y trabajéis en la dinámica que se va a seguir.
El fotógrafo podrá aportar su experiencia y consejos en cuanto a organización, vestuario, lenguaje corporal, etc para que todos estén cómodos en la sesión y los resultados estén a la altura de los objetivos marcados.
Buscar la cámara
En un retrato corporativo, buscar el contacto visual con el objetivo y mirar a la cámara le aportará sinceridad y confianza a la fotografía.
Para tu perfil de Linkedin, mira a la cámara: transmite confianza y sinceridad
Un retrato mirando hacia un lado puede resultar más artístico, pero capta menos la atención del usuario en la imagen. ¡Ojo! Hablamos de retratos corporativos para perfiles como Linkedin.
Si ampliamos a otro tipo de fotografías (para una página web, por ejemplo), usar la mirada en una dirección concreta puede ayudar enormemente a mejorar el rendimiento. Nos permite guiar al usuario hacia el texto que más nos interese para cumplir nuestros objetivos.
Aquí de nuevo tiene importancia la planificación de la sesión. Siempre decimos lo mismo, pero en fotografía corporativa no se trata de hacer la sesión más artística o visual, sino aquella que mejor permita conseguir los objetivos de la marca.
Por eso, si tuviera que dar un 5º consejo te diría que confiaras en un profesional y no le quitaras importancia a ese retrato corporativo que tienes en tus perfiles: es el primer impacto en muchos usuarios y debe transmitir al 100% lo que quieras para tu marca.
¿Qué te han parecido los consejos? ¿Estás haciendo una reflexión sobre qué transmite tu foto de Linkedin ahora mismo? Déjanos tu comentario que estaremos encantados de responder y debatir contigo sobre ello.
¡Hasta el próximo post!